sábado, diciembre 31, 2011

Es un ente cabrón ese, al que llaman tiempo...

Yo me veo aquí, después de tantos años, más vieja, con más graduación en los lentes,
con responsabilidades de gente grande, ganándome mi plata...
cuidando mi estado de animo, mi moral y la de alguien más...
conociendo gente... haciendo vida social, y... joder!! Siendo el ejemplo para algunos...

Lo que quiero decir es; que ya hay cosas que pesan sobre mis hombros, que mi espalda,
mis pies y mis bolsillos lo sienten... que han pasado años ya, ese viejo cabrón llamado tiempo,
y no estuviste ahí para verme calzar un poco más grande cada día,
un poco más importante cada día, un poco más rota cada día...

Es increíble que tenga tu risa dentro de mi oreja a estas alturas,
que sienta la piel de tus manos por las noches... tu corazón me habla desde lejos,
porque aun que ya no filtra tu sangre, él sigue trabajando bombeando duro
y mientras esas células tuyas que le dieron forma sigan ahí, dentro de algún pecho...
sé, que una partecita de ti está aún con vida...

Decir ¡Feliz año nuevo! perdió el sentido hace tiempo,
nunca inicié con un pie izquierdo tan grande y frío un día, un año, un ciclo...

Lo que quiero decir; es que cambiaste mi vida, guiaste mi camino de algún modo
y te doy las gracias, pero no puedo evitar odiarte tanto en estos días...
se me olvida de repente que te corté el ombligo bastantes letras atrás...
y sin importar eso, puedo darme el lujo de decirte; que a pesar de todo, te quiero y aún te extraño.

Iluminame el camino como puedas desde donde estés,
para que pueda seguir haciendo las cosas como hasta ahora...

jueves, octubre 06, 2011

Me trago con tequila,
esta amarga angustia...
de no saber...
de no creer...
de sentir mucho...

Me trago con tequila,
este coraje primitivo...
de querer ser...
de no poder...
de sentir mucho...

Me paso con traguitos de tequila...
el producto nacional por excelencia...
ese famoso plato llamado 'violencia'.

lunes, febrero 21, 2011

Sólo me hace falta una cosa:

Tu mirada al despertar.

Tu mirada frente a mi en el desayuno.

Tu mirada tierna con el beso de despedida.

Sólo me hace falta tu mirada...